martes, 26 de febrero de 2013

REFLEXIONES EN SILENCIO


REFLEXIONES EN SILENCIO

Creo con sinceridad que lo que con más nitidez veo que  me ha aportado esta semana  con vosotros es la capacidad de asumir que hay que empezar a trabajar (investigar) de otra manera.  Se comentaba en una de las sesiones que estamos asistiendo a la segunda gran revolución universal, tras la revolución industrial, y es esta la revolución tecnológica. No nos damos mucha cuenta y, sin embargo, los cambios se suceden a una velocidad astronómica que, en la práctica, no podemos asumir. Ahora bien, la cuestión no es si podemos o no asumir este gran cambio, sino que lo que debemos preguntarnos es si queremos o no asumirlo es decir, si estamos dispuestos a engancharnos a ese futuro o, algunos lo piensan, ese futuro ya pertenece a otras generaciones y nosotros nos vamos a dejar llevar plácidamente hasta quedar obsoletos. Para muchos compañeros con los que he compartido el curso esta revolución no lo es tanto, ya que observan los cambios desde una perspectiva más cercana pero para mí, con ciertos añitos en el tajo, las modificaciones son de calado. Describía hace unos minutos mi PLE y, me doy cuenta, me encuentro plenamente convencido que es bueno aunque también lo estoy de que puede y debe mejorar. Creo que en este sentido el curso me ha servido para acercarme esta nueva forma de pensar y me ha proporcionado herramientas y métodos si no nuevos sí novedosos en mi entorno de aprendizaje y, por lo tanto, también en el entorno de aprendizaje que yo quiero hacer llegar a mis alumnos. ¿Y cuales serían los propósitos que emanan de este reconocimiento? Tengo claro que deseo desarrollar estas capacidades que se me ofrecen con las herramientas 2.0 pero también tengo claro que sólo va a ser una tarea compleja. Creo que la Institución Universitaria debería crear equipos de trabajo en cada Facultad, capaces de capitanear este cambio necesario, desde los cuales se pudiera más cercanamente ayudar a desarrollar técnicamente las ideas y necesidades de profesores, departamentos y alumnos. Por mi parte intentaré continuar modestamente por esta vía e incorporar las ideas expuestas a mi práctica diaria de aprendizaje y enseñanza (también a mi entorno médico profesional).


1 comentario:

  1. Miguel Ángel, has dado en el punto clave, no es cuestión de capacidad sino de actitud. Nuestro objetivo ha sido, por tanto, no trabajar las herramientas (el qué y el cómo) sino lo que hay por detrás (el porqué).

    No se si lo habremos conseguido pero leer artículos como el tuyo anima a creer que si.

    Un abrazo y ya sabes donde puedes encontrarnos :)

    ResponderEliminar